Es la palabra de moda y eso que muchos dicen que no ha llegado todavia.
Si de verdad viene una crisis profunda hay una serie de preguntas que uno debe hacerse sobre sus participadas ¿esta el equipo directivo de la compañia preparado para entender los cambios que se van a producir en su sector? ¿y para gestionar en una posible economia de guerra? ¿seria necesario un nuevo gerente o unos nuevos asesores especificos? ¿hay un presupuesto que cubre de verdad un escenario pesimista? ¿se ha hecho una reflexion sobre que actuaciones se deben hacer si ese escenario se cumple? ¿hay que reorientar el negocio? ¿se debe buscar alguna operacion corporativa como primera opcion?...Esto es un trabajo que se ha debido hacer por lo menos el año pasado y que cada dia que pase sin hacerlo probablemente exija medidas mas drasticas.
En un start-up este efecto es mucho mas importante tanto por el cash que se quema hasta llegar a break-even y su posible aumento por retrasarse este, como porque los resultados sean muy inferiores a los previstos en virtud de menores ventas, menores margenes, mayor competencia... Lo curioso de esto es que el otro dia estuve con un start-up que lleva por lo menos un año buscado socios y al entrar a discutir su business plan me confesaron que no habian cambiado las previsiones pero que como fueron muy conservadoras entendian que se podrian llegar a cumplir.
Cuando vas a hablar con un posible inversor hay una serie de preguntas, que las tratare en proximos posts, a las que tienes que una solida respuesta despues de haberlas preparado. Y en estos momentos el como, el cuanto y el porque has rebajado las proyecciones, asi como las medidas a tomar debes de saber responderlo de carrerilla, seas un start-up o Telefonica. Y no es que tengas que saberlo para seducir a un inversor si no para que el proyecto funcione.
lunes, 6 de octubre de 2008
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Creo que si la start-up se dimensiona con sobresfuerzo horario de los socios (tendente a infinito) y una política de contención de gastos, independientemente del volumen de su financiación, si hay margen para alargar el período hasta el break-even. Creo que hay que evitar la tentación de incorporar (al menos las tecnológicas) muchos indirectos (finanzas, recursos humanos, recepción, etc) al principio, quedando esas funciones para el sobrehorario de los socios. El problema del excesivo funding o el excesivo optimismo es que se incrementa demasiado el burn-out sin una productividad real, las figuras indirectas especializadas tiene sentido cuando la empresa toma volumen.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Es momento de apretarse el cinturon.
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